LA LEYENDA DEL SOL Y LA LUNA

Hace mucho tiempo, en un lugar remoto y lejos del alcance de cualquier ser humano fructificó el amor más bonito y fuerte que jamás se había contemplado: el romance entre el sol y la luna. Tanto se amaban, que siempre estaban juntos y nunca se separaban. Sin embargo, un día la princesa Afrodita, celosa y orgullosa, quiso arruinar su historia de amor seduciendo al sol2 Haciendo gala de toda su hermosura, se presentó ante el astro rey para seducirlo. El sol alabó su increíble belleza pero le dijo que su amor por la luna era más preciado que su gran atractivo o cualquier otra cosa que pudiese ofrecerle. La leyenda del sol y la luna Como castigo, Afrodita les separó para siempre, condenando al sol a salir por el día y a la luna a salir por la noche. Tan tristes y desolados se quedaron, que el padre de todos los dioses, Zeus, se apiadó de ellos y le dijo el sol que si se esforzaba al máximo podría iluminar con sus rayos el rostro de su amada luna. Por eso, algunas veces al atardecer o bien temprano al amanecer, es posible verlos a los dos juntos, en un intento desesperado del sol por iluminar a su siempre amada luna para poder verla.